Durante El Día de la Felicidad, se llevaron a cabo diversas actividades que permitieron a las familias explorar y procesar sus emociones de manera creativa. Se organizaron juegos, talleres artísticos y dinámicas grupales, en las cuales se invitó a los participantes a compartir sus experiencias y reflexionar sobre ellas. Estas actividades proporcionaron un medio efectivo para descargar y transformar esas emociones negativas en algo más positivo y constructivo.
El Día de la Felicidad fue una experiencia enriquecedora para todas las familias participantes. Se pudo apreciar cómo, a medida que las emociones negativas eran liberadas, se abría paso a un ambiente más positivo y comprensivo. Las risas, las muestras de cariño y el apoyo mutuo fueron evidencia del impacto positivo que tuvo este evento en la dinámica familiar.